El intendente de Paso de los Libres, Martín Azcúa, salió a pedir a Carlos «Camau» Espínola que renuncie a su banca de senador, después de la expulsión de Edgardo Kueider. «Camau, los interventores te echaron del partido por traicionar a aquellos que te votaron, por votar la Ley Bases. Ahora sabemos por qué. ¡Devolvé la banca!», dijo el jefe municipal en un video divulgado por redes sociales.
El mensaje replica los argumentos de una discusión que ya se dio en el grupo de WhatsApp del bloque peronista en la Cámara Alta, tal como reveló LPO. Un legislador que integra el pelotón que responde a José Mayans admitió que hubo intercambios especulativos sobre la posibilidad de que Espínola abandone su banca en 2025, si gana la elección a gobernador de Corrientes.
Ante ese escenario, lo relevaría Ana Almirón, una dirigenta de La Cámpora ligada a Cristina Kirchner. El caso es calcado del relevo que haría la entrerriana Stefanía Cora por la salida de Kueider.
El intendente correntino expresó además: «Kueider cayó preso pero sabemos quién es el jefe de la banda». La referencia remite directamente al discurso del formoseño en el recinto durante la sesión que terminó con la destitución del entrerriano, que también apeló a la idea de una organización delictiva.
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Al reclamo de Azcúa se suma José «Pitín» Ruiz Aragón, senador en la provincia litoraleña que también se identifica con la flamante titular del PJ. «Las decisiones de @camauespinola distan mucho del peronismo, y distan mucho más de la conducción de Cristina. Camau, llegaste a ese espacio por la militancia peronista, devolvé la banca», posteó en Instagram este jueves.
Almirón se subió al operativo contra Espínola con video propio. Evocó la campaña de 2021, cuando recorría los pueblos correntinos junto al ex regatista y expresaban «los sueños» de los vecinos de la provincia.
LPO reveló en exclusiva los planes del gobierno y las aspiraciones del jefe de la bancada que integraba Kueider. La Casa Rosada apuesta a Espínola para ganar la gobernación pero exige que Camau «se pinte de violeta» para capitalizar su eventual triunfo y fijarlo como «un leading case».
En ese contexto, crece la furia de un sector del peronismo, que además huele la fragilidad del oficialismo y sus aliados en el Senado después de haber echado a su colega entrerriano, detenido por tentativa de contrabando en Paraguay. Si el correntino dimitiera, Mayans recuperaría otra banca, colocando al interbloque que lidera junto a Juliana di Tullio al borde del quórum propio con 35 legisladores sobre 71, debido a que el chaqueño Víctor Zimmerman tomó licencia para cumplir funciones en el gabinete de Leandro Zdero.
Sin embargo, cerca de Espínola descartan que vaya a renunciar. Y lo mismo entienden en otras facciones del peronismo correntino.
Por caso, tanto entre los diputados como los senadores que representan al peronismo en la Legislatura provincial advierten que «el pedido de renuncia a Camau es importar el problema de Kueider a Corrientes y no es lo que le sirve al peronismo». «Todo esto es parte de una agenda nacional pero no es lo que necesitamos nosotros», aseguran.
El pedido de renuncia a Camau es importar el problema de Kueider a Corrientes y no es lo que le sirve al peronismo.
De hecho, dos fuentes territoriales distintas apuntaron contra José Ottavis, delegado de Cristina para enderezar el PJ en Corrientes. «Ottavis está atrás de todo esto pero es lo mismo de siempre: quieren venir de Buenos Aires a decir cómo armar en nuestra provincia», se quejaron.
Como sea, el operativo contra Espínola es festejado por el radicalismo, que tiene el partido intervenido por el Comité nacional y al gobernador Gustavo Valdés debilitado e inhibido constitucionalmente para reelegir. «Ahora quedó claro que Camau es un traidor para todos», decía a LPO un dirigente de la UCR que se ilusiona con que su espacio retenga el poder.
La senadora kirchnerista Teresa García fue más allá y pidió que un fiscal investigue a Camau. «La alianza entre Kueider y Espínola es dudosa», dijo la senadora bonaerense a Radio Con Vos.