La pregunta, que sólo admite una respuesta correcta, se propaga por la concentración de Racing en Barra de Tijuca. A horas de la definición de la Recopa Sudamericana ante Botafogo, Gustavo Costas camina por todo el hotel de Río de Janeiro en busca de sus jugadores. Quiere esa respuesta que actúe como ansiolítico. “¿En que estás pensando?”, interroga a cada futbolista que cruza.
La Recopa es la obsesión de Racing
El DT de la Academia, un tipo querible más allá de Avellaneda, parece tener cosas del Doctor Bilardo. No duerme en vísperas de partidos definitorios. No lo hizo en Asunción, en la previa a Cruzeiro en la final de la Sudamericana, ni tampoco lo habrá hecho el miércoles por la noche. Es feliz asegurándose, una y otra vez, que la respuesta que busca sea “pensando en la Recopa”. Es la obsesión que este técnico-hincha les bajó tanto a los jugadores como también a la gente, que en más de 80 micros y aviones copó desde ayer las bonitas playas cariocas.
La Academia quiere seguir haciendo historia
De la noche a la mañana, Racing volvió a transformarse en un equipo copero. El año pasado saldó la deuda de 36 años sin títulos internacionales y ahora está a las puertas de sumar su noveno título internacional (en el club cuentan la Supercopa Interamericana de 1988 como un octavo título). Lo quiere hacer sacando chapa. En la Sudamericana eliminó en duelos directos a Paranaense, Corinthians y Cruzeiro. Este jueves quiere terminar de poner nocaut a Botafogo, al campeón de la Libertadores que pudo golear en el Cilindro, pero el 2-0 terminó quedando corto. Sería el cuarto equipo brasileño al que deja afuera en mata-mata…
La estrella que busca la Academia, tan necesaria para seguir encontrándose con su rica historia, también lo es para la nueva dirigencia. Víctor Blanco se llevó los laureles de la Sudamericana. Ahora es tiempo de que Diego Milito pueda comenzar su mandato con el primer título que define. La Recopa, en el corto plazo, siempre fue la prioridad tanto del cuerpo técnico como de los dirigentes. El inicio del Torneo Apertura se programó como una plataforma para llegar de la mejor manera a Botafogo. Por eso en varios partidos Costas rotó jugadores y jamás arriesgó a los que no estuvieron al 100%. Saben bien que ya habrá tiempo de recuperar terreno en el ámbito local, pero lo que necesita el club es seguir sumando estrellas para continuar afianzándose hoy en día como el grande que puede pelear con River y Boca.
Lo que dijo Costas en la previa
“Este grupo me representa como hincha. Podemos ganar o no la Recopa, pero estos chicos se lo merecen. Es un grupo sensacional. Te demuestra el hambre, el compromiso con el escudo entre ellos…Sabemos que todavía falta mucho para lograrlo (la Recopa). No está ganada. Estamos 2-0 pero quedan muchos minutos y este grupo no se la cree. Tenemos que ir a una guerra en Brasil”, supo decir Costas, que será campeón hasta perdiendo por un gol. Desde ese día, el técnico trabaja en mentalizar a sus dirigidos de que la serie sigue abierta. Y también, claro, en alimentar la ilusión de los hinchas. En esto también se especializó Gustavo, quien entiende a la perfección qué fibra tocar.
El clima pesado que hay en Río de Janeiro en la previa al partido
Lejos del marco maravilloso que tuvo la Nueva Olla de Paraguay, Racing será visitante en Río de Janeiro, una ciudad que se torna muy peligrosa para hinchas visitantes. A tal punto que dos hinchas fueron hospitalizados al ser robados y atacados a tiros en las cercanías al hotel de Racing, en pleno Barra de Tijuca. El clima, como casi siempre que se juega un partido definitorio en Río, está pesado. Es probable que muchos hinchas queden afuera esperando poder festejar, ya que las 3.000 entradas para la tribuna Sul se vendieron en pocos minutos. Desde Racing aconsejan ir todos juntos, en los micros con seguridad privada que contrató la propia dirigencia y en cápsulas con escoltas .
Más allá de hacer énfasis en la prevención, todo el mundo Racing espera vivir otra noche inolvidable. Todo el plantel, incluidos los lesionados y hasta viejas glorias de la institución, viajaron con el deseo de poder levantar un nuevo trofeo internacional bajo el ala de Gustavo Costas.
Se viene la hora de la definición para la Academia. Lo espera el campeón de la Libertadores, que llega golpeado pero que en su casa intentará meter presión.
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