Un hecho demencial ocurrió este viernes por la madrugada en un control de la Policía Caminera sobre la ruta nacional 38, a la altura del kilómetro 7.
Dos agentes detuvieron a un vehículo Toyota Corolla en el cual iban el conductor y un acompañante. En ese marco, observaron que llevaban gran cantidad de droga en el interior del rodado por lo cual intentaron detenerlos.
A partir de allí se produjo una locura total puesto que comenzaron a forcejear tanto los que estaban adentro como el agente que intentaba detenerlos. Lo cierto es que el conductor logra poner en marcha el auto y parte a gran velocidad, con el efectivo que tenía mitad del cuerpo afuera y la otra mitad adentro.
En la huida, atropellaron a otro policía que estaba parado en el puesto de control.
Pero, al que seguía intentando que pararan lo llevaron a lo largo de seis kilómetros en esa situación, y durante todo momento le fueron propinando golpes de puño hasta que lo arrojaron en una zona rural.
Simultáneamente, se montó un operativo con móviles de distintas dependencias, logrando finalmente interceptar al rodado no muy lejos de ese lugar.
Allí se procedió a la detención de uno de los sujetos y el secuestro de 11 envoltorios con cocaína, 14 envoltorios con tussi , más de 60 comprimidos de éxtasis y marihuana.
Asimismo, los dos policías que participaron, fueron trasladados con politraumatismos hacia el Policlínico Policial y luego derivados a la Clínica Vélez Sarsfield.