Una obra pública que iba a financiar China ahora será privada y la pagarán los usuarios con sus tarifas

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Una obra pública que costará unos 1.150 millones de dólares para ampliar la red de transporte de energía eléctrica en la Argentina, para la que ya estaba cerrada un acuerdo comercial con China, se licitará ahora para que la construya el sector privado, que prefinanciará sus inversiones mediante el cobro en las tarifas a todos los usuarios del país de un cargo fijo durante los próximos dos años.

Se trata del proyecto «AMBA I«, cuyo objetivo es mitigar el riesgo de colapso del sistema en el corto plazo, mejorar la confiabilidad y eficiencia de la red, principalmente en la Ciudad y el Gran Buenos Aires, reducir los costos medios -menor necesidad de aumento de tarifas o subsidios- y acotar el uso de combustibles fósiles para reemplazarlo por energías renovables.

Las obras permitirían sumar unos 1.100 megavatios (MW) de potencia del sur del país, principalmente de los parques eólicos en el interior de la provincia de Buenos Aires y la Patagonia, así como 250 MW del Litoral y el Norte.

Este conjunto de trabajos es fundamental para reforzar el nodo del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y evitar cortes de luz por falta de generación o sobrecargas en las redes de alta tensión.

El Gobierno publicará en los próximos días -posiblemente la semana que viene- una resolución que establecerá la prioridad de las obras y el mecanismo de financiación, aunque el secretario de Coordinación de Energía y Minería, Daniel González, y la secretaria de Energía, María del Carmen Tettamanti, anticiparon que la obra la harán los privados con un cargo fijo a la demanda.

La inversión de US$ 1.150 millones distribuida entre 15 millones de usuarios (hogares, comercios e industrias) en todo el país representa un costo de aproximadamente 75 dólares por usuario o unos US$ 3 a 2 por mes, dependiendo si se recauda en 2 o 3 años.

En un evento organizado en noviembre por la Universidad Austral, el director Técnico de Transener, Carlos Borga, explicó que el sistema eléctrico tendría un aumento de su costo cercano a 3,4%, lo que implica una necesidad de incremento en las tarifas de 1,4% promedio a lo largo de 3 años y un impacto en la inflación de 0,2%.

A fines de 2021, el gobierno del Frente de Todos -ahora Unión por la Patria- comunicó que había cerrado un acuerdo comercial con la transportista de energía eléctrica china State Grid. Pero el kirchnerismo nunca consiguió cerrar el contrato de financiamiento que estaban dispuestos a acercar los bancos chinos y acusa al ex secretario de Asuntos Estratégicos Gustavo Beliz de haber frenado el interés oriental en invertir en energía, transporte y su infraestructura.

Actualmente el AMBA depende de la generación termoeléctrica de las centrales Costanera, Puerto (ambas de Central Puerto) y Dock Sud (YPF y PAE). Con la construcción de una estación transformadora (ET) en Plomer, General Rodríguez, y una línea de extra alta tensión de 357 kilómetros en 500 kilovoltios (kV) entre Plomer y Vivoratá, entre otras tareas, el 40% de la demanda energética podrá acceder a más oferta del interior.

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